Datos personales

Mi foto
¿Que es Megapraxis? El mundo cambia, y el cambio constante es una de las ideas que conciernen a la Megapraxis, (Heráclito: "Todo fluye"). Otra es su universalidad: es global; hay que analizar todo, explicar todo; no nos conformamos con las partes. La realidad siempre es compleja y la complejidad también es megapráctica. Pero no todo va a ser análisis. Debe haber praxis ¿no? Pues eso, propuestas de acción práctica, que es lo que modifica la realidad. En resumen, conocer mejor la realidad para proponer acciones que la transformen, que la hagan progresar, que sumen “cuantos de progreso”. Pasito a pasito. Es muy simple. Pero no es fácil.

lunes, 21 de diciembre de 2015

Nueva geometría electoral para 2015 (y VI): parada y fonda

En este blog siempre he evitado escribir "al hilo de la noticia". Ni me gusta ni creo que sea una buena idea, ni entra dentro del estilo ni de los objetivos de este blog. Aqui se procuran reposan los pensamientos, se dejan decantar, a veces se destilan y hasta se intenta que cristalicen. No obstante, hare una excepción hoy, porque un día después de las elecciones generales, a las 8 de la tarde, no puedo más que ceder a la tentación de especular tal y como vienen haciendo los periodistas, opinadores varios y políticos de toda condición en las noticias, en las redes sociales, en los medios en general.
Empezaré resumiendo la situación hoy 21 de diciembre. Los resultados electorales han definido por fin aquello que se ha venido fraguando en los ultimos dos años y que en este blog denominamos "Nueva geometría electoral". Hace tiempo que se advertía un cambio, que permitía alimentar cierta esperanza en el advenimiento de una nueva era política. Las circunstancias han matizado mucho esa esperanza, devolviéndonos, una vez recontados los votos, a una realidad no tan ideal, en la que unas elecciones generales no son más que un escalón en una evolución mayor, de más envergadura, más sólida, hacia una sociedad más justa. En esa clave de evolución contínua es en la que me gustaría que se leyeran los resultados.
En este sentido, los cambios que trae la nueva geometria electoral de 2015 son modestos. La siguiente tabla nos lo resume en cifras muy concisas:



Los datos son del Ministerio del Interior. La tabla y la elaboración son mías. ¿Por qué hago yo la tabla y no la copio de cualquier medio, que son más bonitas? Pues porque en ningun medio aparecen algunos de los datos que se muestran en "mi tabla". En especial fíjense en la cuarta columna (de izquierda a derecha). ¿Qué tiene de especial? Pues son los porcentajes de votos a cada partido sobre el total del censo. Ayuda a relativizar estos datos sobre el total de la población en edad de votar (censo electoral).
Obsérvese cómo con un modesto 19,7% de este censo, es decir, menos de 1 de cada 5 personas, se puede dominar un resultado electoral como en esta ocasión ha hecho el PP. Cuando oigan a alguien decir "el PP es mayoritario" le pueden contestar: solo uno de cada cinco personas que podían votar han votado al PP.
Otra forma de relativizar es, por ejemplo, comprobar que la opción más prevalente no es votar al PP ni a ningún otro partido, sino abstenerse (casi 10 millones, que con los que votan en blanco o nulo suman 11.58 millones de personas, un tercio de los españoles censados). He escuchado muchas veces ayer y hoy decir que los españoles somos tontos a la vista de estos resultados. En mi opinion el porcentaje de tontos está dentro de lo normal.
Una cuestión importante que pone de manifiesto los datos de la tabla es el injusto reparto de escaños. Con 7,21 millones de votos, un 19,7% sobre el censo, o un 28,9% sobre los votos escrutados, el PP obtiene el 35% de los escaños de la cámara baja, mientras que con casi 1 millón (0.93 millones), 7,7 veces menos que el PP, IU-UP obtiene 61,5 veces menos escaños. Es decir, el voto a IU-UP es 61,5/7,7=8 veces menos eficaz que al PP en la obtención de escaños.
Es interesante comprobar cuanto suman partidos afines de ámbito nacional (por el momento dejaremos aparte los nacionalistas). Por ejemplo, entre PP y C's, ambos partidos del ala derecha del espectro político, y por lo tanto con afinidades que podrían hacerles coaligarse para gobernar, suman 10,71 millones de votos, mientras que, si tenemos que clasificar a los partidos del ala izquierda, tendremos que sumar votos al PSOE, a Podemos y a IU-UP, que son de izquierda al menos en origen y por sus votantes (no por sus dirigentes en el caso del PSOE): en este caso los votos suman 11,64 millones, o sea, casi 1 millón más que los de derechas. Seguimos, pues, conservando las dos Españas de las guerras carlistas/liberales decimonónicas en un estado perfecto.
Entonces ¿en qué podemos notar la existencia de una "nueva geometría electoral" tras estas elecciones? Pues en que han irrumpido nuevas formaciones políticas que han trastocado un poco el mapa, aunque los dos bloques derecha/izquierda siguen intactos, para desazón de aquéllos que creían superada esa dicotomía. No lo veran sus nietos, pues es una división mucho más profunda de lo que habitualmente se cree, y está presente en todo sistema político, de forma más o menos explícita.
¿Cuánto ha cambiado el tablero político tras estas elecciones? Pues la principal diferencia es que se han fracturado los dos grandes bloques, el de derechas, monopolizado por el PP, y el de izquierdas (con las salvedades enunciadas anteriormente) formado por esencialmente dos fuerzas, PSOE e IU. Por el ala izquierda ha irrumpido Podemos, muy fuertemente, llevándose un buen pellizco de votos del PSOE y algunos de IU. El PSOE tuvo 7 millones de votos en 2011, y ha pasado a tener 5,5 millones en estas elecciones. Por su parte, IU tuvo 1,6 millones en 2011 y ha pasado a 0.93 millones, es decir, ambos han perdido 1,5 y 0.7 millones respectivamente, y entre ambos, 2,2 millones, pero Podemos (y sus coaliciones en determinadas circunscripciones) ha obtenido 5,2 millones, más del doble de lo cedido por los dos partidos mencionados. ¿De dónde han salido esos votos? Pues hay varias fuentes posibles: algunos abstencionistas menos en estas elecciones, junto a votos de izquierdas de determinadas opciones de fuerte implantación nacionalista en Cataluña y Euskadi, donde esta formación ha obtenido muy buenos resultados, podría explicar esta diferencia. Por su parte, la irrupción de C's en el ala derecha no ha hecho variar demasiado la situación en este flanco, ya que prácticamente se queda como estaba, pues el PP obtuvo 10,9 millones de votos en 2011, lo cual es más o menos igual que lo obtenido por la suma del PP más C's en estas elecciones (10,7 millones).
Una modesta reflexión: si la izquierda hubiera acudido junta en coalición a las elecciones, probablemente hubiera podido lograr mayoría suficiente como para formar gobierno. Ello habría significado un gran avance frente a las políticas actuales que solo pretenden hacer retroceder nuestros derechos, servicios públicos y bienestar. Al no haberlo hecho, se ha diferido el establecimiento de las bases que den solución a la situación de precariedad social que rige actualmente, o al menos que la mitiguen. En consecuencia, todo será más lento y más difícil por la proverbial división de la izquierda.
En conclusión, la nueva geometría electoral ha hecho variar algo el panorama, pero no lo suficiente: la derecha sigue siendo muy fuerte a pesar de la terrible legislatura que ha protagonizado, que quedará para la posteridad como la peor de la historia reciente de España: la más desastrosa en términos económicos, pero también la más inhumana por la violencia verbal y física ejercida contra los ciudadanos desde las esferas del poder. Lo más importante es que ya no podrá gobernar sin freno con la mano dura que ha empleado sin compasión contra los ciudadanos de este país. Tendrá que pactar, o algo. Por su parte, el cambio político no ha llegado aún al Parlamento, pero parece que está en camino. Es un proceso lento, en el cual estas elecciones no son más que una etapa, y probablemente no es la más importante.
Para finalizar, un temor: se ha hablado mucho hoy de un "pacto a la alemana" entre el PP y el PSOE, que permitiría gobernar a una coalición un tanto "contra natura" 4 años. Se habló de tal coalición antes de las elecciones, y siempre fué descartada por los protagonistas, especialmente el PSOE, a cuyos votantes les parecería la mayor de las traiciones hacer ese pacto. Hoy sin embargo, determinados dirigentes del PSOE han expresado su opinión favorable a dicho pacto. Si pactan, habrán dado la razón a los críticos del "bipartidismo PPSOE" y los votantes que le quedan al PSOE, muy moscas ya con este partido por sus repetidas traiciones, no lo tolerarán. Puede ser el principio del fin de este histórico partido.

¡Salud y megapraxis!


1 comentario:

  1. No sé, yo estoy temblando,la verdad. No sé si habrá un pacto antinatural, pero me temo que el PSOE -en un acto suicida- acabe facilitando el gobierno a la derecha. No sé. Habla mi miedo, lo sé. Pensar en otros 4 años de PP... uf.

    Y lo de las elecciones anticipadas, ¿cómo se ve desde ahí?

    ResponderEliminar

Deja aqui tu comentario