Datos personales

Mi foto
¿Que es Megapraxis? El mundo cambia, y el cambio constante es una de las ideas que conciernen a la Megapraxis, (Heráclito: "Todo fluye"). Otra es su universalidad: es global; hay que analizar todo, explicar todo; no nos conformamos con las partes. La realidad siempre es compleja y la complejidad también es megapráctica. Pero no todo va a ser análisis. Debe haber praxis ¿no? Pues eso, propuestas de acción práctica, que es lo que modifica la realidad. En resumen, conocer mejor la realidad para proponer acciones que la transformen, que la hagan progresar, que sumen “cuantos de progreso”. Pasito a pasito. Es muy simple. Pero no es fácil.

lunes, 25 de abril de 2011

Cambio climático y deformación asimétrica de la realidad

Cambio climático, calentamiento global...¿que podemos añadir desde este blog a lo mucho que hay ya escrito sobre este asunto? Pues una pequeña reflexión sobre un aspecto que no tiene que ver con el centro del problema -la Tierra, el único planeta que por el momento podemos habitar, se está calentando a un ritmo sin precedentes en la historia- sino con un aspecto quizá marginal, pero consideramos que importante: la aceptación "asimétrica" del problema según la ideología del sujeto que se enfrenta a la cuestión.
Vayamos por partes. Por un lado, los científicos nos muestran, sin el más mínimo asomo de duda, un hecho (no una opinión, ni una posibilidad, no: un HECHO cierto e incontrovertible, ver gráfica más abajo) como es que la temperatura media del planeta se ha elevado 1.5 grados centígrados en los últimos 50 años, y que esto va a continuar progresando hasta hacer inhabitable buena parte del planeta si seguimos quemando combustibles fósiles y produciendo dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero al ritmo que lo hacemos actualmente. La habitabilidad futura del planeta depende, pues, de lo que hagamos ahora con los combustibles fósiles.

Esto es muy sencillo de entender, y fácil de demostrar. No requiere costosos sistemas de medición ni complejos modelos matemáticos de difícil comprensión. La red de estaciones meteorológicas y las series de datos históricos recabados por éstas nos muestran una realidad muy preocupante para el destino de la humanidad. La gráfica que mostramos arriba, sacada de un estudio publicado en la revista Nature en 2008, no deja lugar a dudas. Es fácil de interpretar: a la izquierda, eje vertical, la temperatura media mensual de la tierra en cada uno de los años de la serie que se representa en el eje horizontal. De arriba a abajo, 4 gráficas nos muestran, respectivamente, los datos térmicos globales (sin filtrar), las oscilaciones internas (ENSO, "El Niño Southern Oscillation", la conocida oscilación periódica del hemisferio sur; y COWL, "cold oceans–
warmland" el equivalente de "El Niño", pero en el hemisferio Norte) que podrían afectar a los datos globales presentados arriba, y, por último, los datos, una vez filtrados (corregidos) para minimizar la influencia de las oscilaciones internas. Tanto considerando la influencia de las oscilaciones internas como sin considerarla, la conclusión es la misma: la Tierra se está calentando, y este calentamiento es más intenso y más rápido en los años más recientes.
Ya se han empezado a notar los efectos del calentamiento. Los casquetes polares se están descongelando, diversas enfermedades normalmente restringidas a los trópicos se están haciendo cada vez más presentes en regiones donde no habían sido nunca observadas, desastres meteorológicos como huracanes, tifones, etc son cada vez más intensos y frecuentes, etc, etc. Pero lo que nos aguarda en un plazo no demasiado lejano (lo veremos muchos de nosotros) es una situación sin precedentes para la que tendremos que prepararnos adecuadamente, porque va a afectar a nuestro modo de vida, a nuestros recursos, a nuestra salud. Lo racional es intentar cambiar ese destino, y en cualquier caso tratar de prevenir sus efectos, además de prepararse y adaptarse como especie a las nuevas condiciones ambientales, cuando esto sea posible.
Pues bien, llegamos al tema central de esta entrada, es decir, lo que nos llama la atención como megaprácticos. ¿Como encaja la gente este tema? Como en muchos otros casos, se produce una asimetría en la aceptación de este tipo de información (repetimos, son hechos, no opiniones). Mientras que en medios generalmente de la izquierda política, no se pone en duda la veracidad del hecho y sus consecuencias (de una forma un tanto acrítica, hay que reconocer), en medios que podríamos caliificar en general como "conservadores", el cambio climático, o calentamiento global, se pone permanentemente en duda, cuando no se niega de medio a medio.
¿Por que ocurre esto? Parece que entre los conservadores se considera que el mundo actual, cuya economía está basada en el consumo de bienes para cuya fabricación, transporte, comercio, etc se requiere un gran consumo de combustibles fósiles, es lo bastante perfecto como para que ninguna medición científica lo pueda estropear: "No dejes que un hecho científicamente demostrable estropee tu fe en la economía de mercado" podria ser su eslógan. En este tema se produce una "deformación asimétrica de la realidad" (ver entrada del 2 de enero de 2011, en este mismo blog) muy acentuada, tal vez la más acentuada que conocemos. Para un "creyente" en la bondad esencial de la economía neoliberal, esta especie de "rebeldía" de la Tierra no puede ser cierta. Los efectos de la explotación exhaustiva de los recursos terrestres no puede volverse contra el género humano. Entonces se buscan explicaciones alternativas. Los prejuicios ideológicos no permiten admitir que el sistema económico vigente es la causa del desastre. Lo que se cuestiona, entonces, es, o bien la veracidad de los datos científicos (que son difíciles de cuestionar, francamente), o bien el alcance y consecuencias de esos datos. Es cierto que hay escépticos que, admitiendo la cuestión central (que la tierra se está calentando), ponen en duda que sea la actividad humana la que cause tal calentamiento, y buscan teorías que permitan explicar este calentamiento por causas naturales (ciclos geológicos o solares, por ejemplo). Esta reacción es también falaz, pues viene provocada por prejuicios ideológicos irracionales que impiden aceptar la interpretación más plausible, el origen antropogénico del calentamiento global, un hecho para el que existe evidencia científica abrumadora.
En resumen, el cambio climático representa un caso excepcionalmente claro de deformación de la realidad (en este caso, negación de los hechos probados) para que un sector de la población se siga sintiendo cómodo con un modelo de sociedad responsable de la generación de "entropía" en forma de calor, contaminación, resíduos, etc en el plano ambiental, pero también de "entropía social" en forma de parados, excluidos sociales y desigualdad entre personas. Algún otro dia abordaremos este tema de la entropía social y cómo los creyentes en la economía neoliberal (no olvidemos que este es el signo que nos gobierna, da igual el partido en el poder) limpian sus mentes y sus conciencias con ideas "originales" para eludir poner en cuestión "su sistema".

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja aqui tu comentario